El secreto de la constancia. Consejos de un deportista de élite.

Seguro que si os menciono la palabra sobreentrenamiento, muchas de las personas que lean esto, dirán que no saben a que me refiero, como si os hablo de lactato, acido láctico....Quizá si os digo agujetas, sí que os hagáis una idea.
 Pensando en qué consejo dar a personas que padecen fibromialgia, o fatíga crónica, yo todo un deportista de élite, todo sano y poderoso (físicamente hablando), recordé el cúmulo de sensaciones que  tengo, cada vez que debo entrenar o competir tras una fase extrema de competiciones y entrenamientos, viniendo a mi mente aquellos días en los que el dolor de piernas y el cansancio, casi no me dejan levantarme de la cama. A penas puedo rodarme hacia a un lado para caer de ella, y sin embargo, me esperan seis horas de duro entrenamiento y cientos de kilómetros por delante. Solo pensarlo, me dan ganas de llorar. 
Sin embargo, los contratos mandan, mi sustento y el de mi familia, manda sobre mi infinito cansancio y dolores, y por tanto, salgo de la cama y vuelta a empezar.
No es comparable con la inevitable crueldad del destino, que hace que padezcas Fibromialgia o Fatiga Crónica. Yo elegí ser deportista de élite, y decidí pasar estas penurias, en cambio, un enfermo, no elige padecer su enfermedad, aunque yo también podría decidir dejar el deporte de élite y no lo hago por MOTIVOS, sí, sí, por MOTIVOS.
Y ese es mi consejo, tener MOTIVOS, y si no los tienes, buscarlos. MOTIVOS para luchar, para dar un pasito más cada día, para hacer crecer tu autoestima cada día, para sobreponerte un poquito más cada día al dolor, y cuando no puedas, sobrellevarlo un poquito mejor, planeando con ilusión lo que harás en el momento que te duela un poco menos. 
En definitiva, la vida son MOTIVOS para luchar, y para hacer lo posible por avanzar, como un deportista de élite. Vuestra lucha por llevar una vida plena y con esperanza, se debe basar en tener MOTIVOS para entablar la batalla de cada día.